Cuando el mundo se detuvo, la palabra siguió.
En 2020, la pandemia nos tocó a todos: hubo miedo, distancia, silencio.
Pero desde la Fundación Teichon, el Encuentro Internacional Literatura al Mar no se detuvo.
Se transformó.
Pasó de lo presencial a lo virtual, y encontró en las redes y en la pantalla una nueva orilla para sembrar esperanza, cultura y resistencia en medio del caos.
Porque incluso en tiempos oscuros, la palabra sabe abrir caminos.